Niños y Adolescentes ante la avalancha de tecnología


José Luis Mota Garay



En España hay en este momento más móviles que habitantes y en 2005 se vendieron más de dos millones de videoconsolas. Datos que justifican el estudio realizado por Xavier Bringué y Francisco Javier Pérez-Latre sobre el uso y manejo de las nuevas tecnologías: Internet, videojuegos, móviles… que han seguido a la televisión. La investigación resume las respuestas, a un cuestionario de 98 preguntas, de una muestra de 4.068 chicas y chicos entre 8 y 18 años de veinte ciudades españolas. Parte del resultado lo han presentado, en “Nuestro Tiempo. Revista de cuestiones actuales”. Los resultados que ofrecen cuadran con los que aparecen en varios estudios muy relevantes que se han hecho en Estados Unidos, en los que se incluyen los de Kaiser Family Foundation y Pew Internet Proyect for American Life.

En primer lugar, se observa que las preferencias televisivas de los niños y adolescentes no difieren de las del conjunto de la población, aunque sí se concluye que ven menos televisión (150 a 180 minutos al día) que sus padres; y ellos piensan que ven demasiada. Les gusta ver la televisión con otras personas; no son adictos al cambio de canal, sino que buscan los programas que les atraen con contenidos específicos. Prefieren Internet, los videojuegos o el teléfono móvil, sobre la televisión, porque estos medios les permiten interactuar y dialogar, a través de las pantallas, Los teléfonos móviles los utilizan el 65% para enviar mensajes y hacer y recibir llamadas telefónicas. El uso de los videojuegos es también social, el 37% juegan, sobre todo, con hermanos o amigos. El 65% se da cuenta de los riesgos inherentes a estas nuevas tecnologías: saben que Internet les quita tiempo para otras actividades, y de manera más concreta para hacer los deberes y para la familia. También saben que Internet plantea riesgos de adicción. Son realistas: el 70% considera que Internet es útil para ellos, pero sólo un 20% lo considera imprescindible. Otra cosa es la desconexión que haya entre lo que piensan y lo que hacen.

Los asuntos tratados en la encuesta muestran algunas pautas de comportamiento distintas para las chicas que para los chicos. Para las chicas, las aplicaciones de Internet más valiosas son el chat y el Messenger; los chicos son ávidos usuarios de juegos on line. La preferencia por los teléfonos móviles, sobre la televisión, es muy alta en las chicas (73%) y un poco más baja en los chicos (60%). Los videojuegos parece el ámbito natural de los chicos. Las chicas están más orientadas a la comunicación y a las amistades.

El informe sugiere a los padres que no piensen “poco puedo hacer, porque estas novedades me superan”; ni que tampoco intenten aislarlos de esos medios, asunto imposible de conseguir, puesto que las nuevas tecnologías de la comunicación forman parte integral de sus vidas; más bien lo que tienen que hacer es aprovechar la oportunidad de acercarse a los hijos para que les enseñen y esto facilite una mayor comunicación.