El maravilloso reto de darse y unirse en matrimonio para toda la vida
Remedios Falaguera
Estamos rodeados de casos de roturas familiares dolorosos que producen graves heridas en todos sus miembros, nos pretenden vender el matrimonio como una realidad que anula el libre desarrollo de nuestra personalidad. Vivimos una época marcada por el hedonismo y la inmediatez de satisfacciones que nos lleva irremediablemente a rechazar el compromiso, trivializar la sexualidad y, disociar matrimonio y descendencia haciendo que cada vez sea más difícil encontrar modelos que nos sirvan de referencia.
Aun así, me gusta ir de boda! Ver a una pareja joven traspirando por todos los poros de su piel la ilusión de regalarse al otro, la alegría y coraje en el compromiso de “querer quererse” el resto de sus días, me llena de satisfacción. Mirarles a los ojos y darme cuenta de que no solo se casan porque se quieren, sino que se casan porque se querrán más aun en el futuro es como un remanso de aguas limpias en la profundidad de la charca sucia y maloliente en la que muchos pretenden que vivamos.
Para muchos, este maravilloso reto de darse y unirse en matrimonio para toda la vida, se presenta como un ideal inaccesible, como un deporte de alto riesgo, aparentemente peligroso y bajo unas condiciones especiales. Pero si nos planteamos el verdadero significado del matrimonio, y lo que de él se deriva, las responsabilidades que asumimos y la aventura que supone el “siempre te volvería a escoger a ti”, sabremos que con mucho esfuerzo y una preparación adecuada somos capaces de hacer rafting, o mejor dicho, somos capaces de amar.
Dicen los expertos en este tipo de deportes que no necesitas mucha preparación física. Únicamente hay que tener en cuenta una serie de precauciones antes de realizar este tipo de actividades:”Es preciso realizar un cursillo, que se suele impartir por el monitor poco antes de iniciar el descenso. Además deberemos elegir trayectos adaptados a nuestro nivel. Pero lo más importante es mantener la calma en las situaciones difíciles, pensando que es un deporte de equipo y que la coordinación con los demás componentes del grupo es fundamental”.
Me gusta ir de boda! Me gusta porque me recuerda que en este nuevo proyecto , que en mi caso solo dura 23 años, no es facil mantener el equilibrio y requiere un poco de esfuerzo. Por lo tanto, no podemos perder nunca el asombro por la naturaleza creada y antes de tomar impulso cada día, deberemos revisar los materiales y comprobar la fuerza de las aguas para adecuarnos a ellas. Una vez hecho todo esto, lanzarse a esta locura por hacer con nuestro “otro yo” es el deporte de alto riesgo más …recomendable para la salud.